Por: Redacción Cuba Ron
Casi 20 años transcurrieron para que a Cuba se le reconociera el derecho de uso de la marca Havana Club, ron insigne de la Corporación Cuba Ron S.A., en Estados Unidos. La disputa legal por la distribución mundial del ron tuvo su fin hace sólo unos días en la Oficina de Patentes y Marcas del país norteño.
Allí se ratificó la legalidad de Havana Club como propiedad de la empresa Cubaexport, contraparte en la Isla del fabricante francés de licores Pernod Ricard, distribuidor internacional de la bebida. El abogado David Bernstein, defensor de la compañía cubana en Nueva York, recibió la buena nueva de que se había permitido renovar el registro de la marca en Estados Unidos.
La batalla entre la compañía cubana y la trasnacional Bacardi Limited, radicada en la Bermudas, se originó en 1998, cuando se emitió el Artículo 211 de la Ley Ómnibus de Asignaciones –conocido como Sección 211– el cual facultaba al grupo Bacardí-Martini para comercializar bebidas con las denominaciones Havana Club y Ron Matusalén. De esta manera, quebrantaba normas del acuerdo sobre propiedad intelectual de la Organización Mundial del Comercio (OMC) y del Convenio de París para la Protección de la Propiedad Industrial.
Aunque hace 13 años el Órgano de Solución de Diferencias (OSD) de la OMC, se pronunció con resoluciones en contra de la Sección 211, la legislación continuó sin modificaciones. El asunto quedó de cierta forma estancado cuando en 2012 la Corte Suprema se declaró no apta para examinar el asunto.
Sin embargo, Cubaexport no permaneció de brazos cruzados. El caso volvió a la oficina de marcas debido a la demanda de la parte cubana de que el registro no podría ser revocado y que seguiría sin movimientos mientras se mantuviera el bloqueo.
Con el interés de renovar y mantener el registro de la marca Havana Club, Cubaexport aplicó el pasado martes a una licencia de la OFAC para pagar sus gastos de inscripción. La petición fue aceptada, no obstante, sólo será válida hasta el 27 de enero, fecha a la que se acata, pues el período de diez años data de 2006, cuando fue rechazado el intento de Cubaexport por volver a registrarse.
Según declaró a los medios de prensa Olivier Cavil, portavoz de Pernod Ricard, Havana Club ya fue presentada a inscribirse como marca por otra década. Si bien la información resulta positiva, Cavil remarcó que “no es demasiado significativa. No hay impacto en el negocio en lo absoluto, porque el embargo sigue vigente”.
El bloqueo a pesar de la noticia golpea directamente, pues Cuba aún tiene prohibido comercializar en territorio norteamericano. La medida económica impuesta por más de 50 años a la nación cubana prohíbe la mayoría de las transacciones financieras con la isla a menos que estén autorizadas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro (OFAC) del gobierno norteamericano.